Los actuales estados latinoamericanos nacieron de la repartición colonial de América del Sur.

Cuando los primeros conquistadores europeos llegaron, encontraron civilizaciones desconocidas, entre los cuales los aztecas y los mayas, los incas, los mapuches.

  • Los aztecas y mayas vivían en la zona que hoy corresponde con México y Guatemala
  • Los incas vivían en los Andes
  • Los mapuches en lo que hoy se llama el cono sur (Argentina, Chile)

Existían muchísimas etnias diferentes, a veces en conflicto.

Cuando Cristóbal Colón llegó a América, pensaba que estaba llegando a las Indias, entonces dio a los habitantes de estas tierras el nombre de indios. Hoy siguen existiendo descendientes de estas civilizaciones, que se llaman indígenas.

Los españoles empezaron a gestionar la parte de América Latina que le tocó. El Tratado de Tordesillas dio a Portugal la parte que corresponde a lo que hoy se llama Brasil. Por eso en Brasil, se habla portugués.

La organización de América Latina por parte de los españoles no tomó en cuenta la realidad social y étnica de los autóctonos.

Había cuatro virreinatos:

Virreinato de Nueva España: de Estados Unidos (California, Texas, Arizona, Florida, etc.) hasta Costa Rica.

Virreinato de Nueva Granada: la zona caribeña (Colombia, Venezuela, Ecuador, Panamá).

Virreinato del Perú: zona andina

Virreinato del Río de la Plata: cono sur y Bolivia

Estos virreinatos se componían de provincias, se trataba de territorios que formaban parte del imperio español. Los virreyes eran los representantes del rey de España en los virreinatos.

Cuando los movimientos de independencia empezaron en 1810, los países se crearon siguiendo las fronteras de las antiguas provincias de los virreinatos.

Simón Bolívar, el Libertador, participó en estos movimientos. Su sueño era crear una federación de estados, un poco como en Estados Unidos. Pero fracasó en su proyecto y nacieron los estados actuales. La independencia de América Latina terminó en 1898, con la independencia de Cuba.