Son proposiciones o suboraciones subordinadas que cumplen el mismo papel que un adjetivo.
Por ejemplo: el vestido que compré ayer es muy bonito.
“Que compré ayer” = nuevo
Atención, no se puede reemplazar siempre una oración subordinada adjetiva por un adjetivo aunque desempeñan la misma función sintáctica.
Una oración subordinada adjetiva suele ir introducida por:
- Un pronombre relativo: que, quien, el cual, la cual, los cuales, las cuales, etc. La casa que pertenece a Pedro es la casa donde nací
- La palabra Cuyo: los chicos cuya camisa es blanca me tienen que seguir Cuyo, a, os, as tiene valor de determinante posesivo
- Un adverbio relativo: donde, cuando, como. La manera como lo hace es muy interesante
Los pronombres relativos pueden ser sujeto, complemento directo, complemento indirecto y complemento circunstancial.
Las oraciones subordinadas adjetivas pueden ser también impersonales:
- Lo vi salir del lugar del crimen: infinitivo
- Encontramos a un hombre herido: participio pasado
- El profesor encontró a su alumno haciendo sus deberes: gerundio
Existen dos tipos de oraciones subordinadas adjetivas
- Especificativa:
He llamado a mis amigos que están enfermos: je n’ai appelé que mes amis qui sont malades.
- Explicativa:
He llamado amigos, que están enfermos: j’ai appelé mes amis et il s’avère que ces amis sont malades.
Attention, il n’y a qu’une virgule qui permet de faire la différence, cette virgule est donc capitale.
Los antecedentes de las oraciones subordinadas adjetivas pueden ser:
- Un sustantivo: la casa que está a la derecha es la mía
- Un pronombre: vi a algunos que no obedecían
- La expresión “lo + adjetivo”: lo curioso que ha aparecido en la historia es que...
- Una frase entera: ha cambiado de trabajo, lo cual me parece muy raro
Cuando el antecedente desaparece, la oración subordinada adjetiva puede sustantivarse:
Por ejemplo:
Las personas que pretenden tener razón se equivocan = con antecedente
Los que pretenden tener razón se equivocan = sin antecedente = ceux qui prétendent...