Fiches Repères / Histoire et actualité

América Latina se divide en 3 subcontinentes: América del Sur, América Central y América del Norte (con un único país latinoamericano: México).

Los países hispanohablantes de América Latina son antiguas colonias españolas. Incluyen países de la región del Caribe como Cuba o República Dominicana.
Brasil es una antigua colonia portuguesa.

Puerto Rico tiene un estatuto especial: antigua colonia española situada en el Caribe, sigue siendo un territorio de Estados Unidos (pero con cultura latinoamericana) con el estatuto de Estado Libre Asociado.

Los habitantes de América Latina (625 millones) son descendientes de las civilizaciones precolombinas, de las olas migratorias que llegaron al continente (de España, Italia, Portugal…) y de los pueblos africanos trasladados al continente para la trata de esclavos.

El mestizaje es muy importante y se crearon sincretismos religiosos (por ejemplo la santería en Cuba). Actualmente es el primer continente católico del mundo.
Las civilizaciones autóctonas dejaron muchas huellas arquitectónicas: Cuzco, Machu Picchu, Chichén Itza….

España es una monarquía parlamentaria que se fundamenta en la Constitución de 1978.

La soberanía nacional reside en el pueblo español que vota a sus representantes: los miembros de las Cortes: Parlamento de dos cámaras (el Congreso de los Diputados y el Senado). Esos miembros son elegidos por un período de 4 años.

El Presidente del Gobierno actual es Mariano Rajoy y fue elegido por los diputados (en 2016, segundo mandato).

El Rey Felipe VI ejerce las funciones protocolarias; según el título II de la Constitución: «

El Rey es el Jefe de Estado, símbolo de su unidad y permanencia ... ».

El Estado español es autonómico: lo componen 17 Comunidades Autónomas a las que se suman 2 territorios autónomos: las ciudades de Ceuta y Melilla (al norte de Marruecos).

Las Comunidades autónomas tienen competencias propias, cada 4 años se celebran elecciones autonómicas que permiten formar el Parlamento de la Autonomía.

Se distinguen las competencias de las comunidades autónomas de aquéllas del Estado Central que son los asuntos exteriores, la defensa, los asuntos económicos generales….

1923 -1930: Dictadura de Miguel Primo de Rivera

1931-36: Segunda República

14 de abril de 1931: proclamación de la Segunda República española. El Rey Alfonso XIII abandona el país.

1933: victoria de la derecha en las elecciones
octubre de 1934: Revolución en Asturias (insurrección armada) duramente reprimida por el ejército

1936: victoria del Frente Popular (coalición de izquierda en las elecciones)

17 y 18 de julio de 1936: levantamiento militar contra el gobierno de la Segunda

República: inicio de la Guerra Civil

1 de abril de 1939: final de la Guerra Civil y victoria del bando nacional (los franquistas)

1939- 1975: Dictadura franquista

20 de noviembre de 1975: muerte de Francisco Franco. El Rey Juan Carlos es su heredero oficial.

Al salir de los 36 años de dictadura franquista (1939-1975), el proceso de la Transición Democrática marcó el paso de un régimen dictatorial a una democracia caracterizada por el multipartidismo, las elecciones libres por sufragio universal, la aparición de nuevos derechos y libertades y sobre todo una nueva Constitución.

22 de noviembre de 1975: inicio de la Transición Democrática con la proclamación del Rey Juan Carlos (sucesor designado por Franco)

1976: fue aprobada la Ley de Reforma Política por referéndum: reformaba el sistema político heredado del franquismo y preveía la celebración de elecciones generales con sufragio universal directo. Permitió el establecimiento de un sistema plenamente democrático en España.

El paso siguiente fue la legalización de los sindicatos y los partidos políticos, incluso el Partido Comunista.
junio de 1977: se celebraron en España las primeras elecciones libres desde 1936.

Diciembre de 1978: se aprueba la nueva Constitución

23 F (febrero) de 1981: durante la investidura de Calvo Sotelo, nuevo presidente del gobierno, se produjo un golpe de estado por el Teniente Coronel Tejero. Intervino el Rey para detener el golpe.

Antes de la crisis, España experimentó un periodo de bonanza económica basado esencialmente en el primer pilar del “milagro económico español”: el sector inmobiliario.

En 2008, estalló la crisis económica: marca, en España, el contagio al sector de la construcción, lo que provocó el estallido de la burbuja inmobiliaria y, a su vez, la explosión de la tasa de paro que pasa del 8,5% al 20,5% en 2 años. El sector financiero también estuvo contaminado por poseer productos tóxicos. Algunos bancos españoles sufrieron pérdidas y el PIB se hundió. El déficit se disparó: los ingresos del Estado se redujeron y los gastos crecieron.

Para tranquilizar a los mercados, el Estado español empezó a recortar los presupuestos. Los recortes implicaron la reducción de las prestaciones sociales, el aumento de los impuestos que tuvieron consecuencias sociales desastrosas. La brecha social aumentó por las medidas de austeridad, los desahucios se multiplicaron y España volvió a convertirse en un país de emigración.